29/12/10

"HIRVEN" LOS RECUERDOS (Nota a Palmiro Cavallasca)



Hablar con Omar Lefosse es hacerlo con Palmiro Cavallasca. Tras casi dos horas y pico de mate, junto con Marisa realizamos esta nota (ver primera parte en http://elayervuelveami.blogspot.com/2010/12/tenes-un-geniol.html ) y la gran sensación es que hablando con él, uno puede sacarse varias dudas que siempre giraron en torno a esta inolvidable telecomedia de los años '80 escrita por Don Abel Santa Cruz y emitida por ATC en 1983 y luego por Canal 9 con el nombre de "Séptimo Grado... adiós a la escuela". Compartimos entonces la segunda parte de esta nota a Omar Lefosse "Cavallasca":
M: ¿Se llevaban bien o grababan y se iban?
O: Cuando grabábamos éramos amigos y cuando terminábamos nos íbamos porque yo vivía en Aldo Bonzi, tenía dos horas de viaje. Eran jornadas muy largas. Así que nos juntábamos los fines de semana. Yo me juntaba con Cirilo, Siracusa y Anselmi.

M: ¿Cómo era Cristina?.
O: Dos capítulos grabábamos por día, desde las 12 del mediodía hasta las 10 de la noche, la veía más a ella que a mi vieja. Cuando nos despedimos, ell me firmó una foto que dice “para mi cuarto hijo” o “para mi hijo de la vida, te quiero mucho, tu segunda mamá”. Yo le iba a poner “mi segunda mamá” pero se me adelantó. Tenía 13 años y ésa era la imagen que ella nos daba. Nos ayudaba cuando nos equivocábamos, venía al camarín, estudiábamos la letra. Era macanuda, laburaba muy bien. Lo mismo Romualdo Quiroga. Con Efraín (Héctor Fernández Rubio) hasta el día de hoy nos hablamos por teléfono.

G: ¿Te llaman de la tele?
O: De Anabella, me llaman pero no pagan, hay que ir gratis. Lo mismo mi viejo, hasta el día de hoy sigue yendo a cástings, él me lo cuenta y yo ya me despegué de eso. La vez pasada me dijo “voy a lo de Anabella”. Le pregunté de qué iba a hablar y me dijo que de su profesión de extra y todo eso. Mi viejo aparece en la película “Pelota de Trapo” (nos muestra el afiche), trabajó con Toscanito, y en las de Olmedo y Porcel. Entonces le volví a preguntar en carácter de qué iba y me dijo “como el papá de Cavallasca”. Le dije que tenía que ir por él, no por mí. Dicho y hecho, fue y dijo que era mi viejo. Media hora antes de salir al aire, el remise estaba ahí. Antes de salir me dijo que les había contado en las películas en que había trabajado y que al final “les dijo”. “¿Qué les dijiste?”, le pregunté. “ Que era el padre de Cavallasca”. Bueno, me pareció bien porque era algo que sumaba. A la media hora lo llamo y le pregunto qué pasó, que al aire no estaba, Me dijo que el productor le había pedido que fuera conmigo, la nota se la daban pero tenía que ir yo. Es decir, le pusieron esa condición. Le dije a mi viejo que lo conveniente hubiera sido decirlo pero en medio de la charla con Anabella, pero que fuera por él, y no por mí. Entonces le pregunté que hizo y me respondió : “yo me planté, le pedí una luca para mí y tres lucas para vos, Si quieren que venga con Palmiro (porque mi viejo me dice Palmiro) nos pagan esto”. Claro, el productor le dijo “un gusto conocerlo, pero acá no se le paga a nadie”. Le dije: “gracias papi me hiciste quedar para la mierda” (risas).

M: Omar, ¿el que está en Facebook como Palmiro sos vos?
O: No, no sé quién es ése. Y hay uno que dice ser el verdadero. Por ahí es alguno de los anteriores, no sé.

M: ¿Y es parecido a vos?
O: No, nada que ver. El primer Cavallasca tendrá que tener ahora 56 años. El segundo, 47, 48 y yo tengo 41.

M: ¿Y qué pasó con el material? ¿quién lo tiene?.
O: Según me dijeron, hay cosas rescatadas de Estrellas Producciones. También dijeron que supuestamente, cuando Sofovich agarró Canal 7 borró para usar las cintas, pero no creo que Sofovich haya hecho eso, es imposible, él es del palo. Después dijeron que está todo en México. Abel Santa Cruz era el autor y cuando él falleció, la mujer vendió los derechos de Jacinta Pichimauida a Televisa de México. Entonces parece que Estrellas Producciones había comprado algo.

M: ¿No te gustaría tener el ciclo para verte?
O: Y sí, pero es jodido tener el ciclo entero. Bah, los dos ciclos porque después fuimos a Canal 9.

G: Claro, “Séptimo Grado, adiós a la escuela”
O: No fue un fracaso, pero yo estaba muy grande. Fue a mediados del ’84 y terminó antes del ’85. En ese transcurso vamos a Perú. Fue volver a la tele, me acuerdo que estaba en Canal 9 y me preguntaban “¿vos vas a hacer de Palmiro Cavallasca?”, Y yo les decía: “No, yo ‘soy’ Palmiro Cavallasca” (risas). Me acuerdo del primer bocadillo mío, tenía que decir la frase “me hirve la cabeza”. Y no me salía el bocadillo y ahí tenía que agarrarme la cabeza con una sola mano, ya no estaba Marta Reguera, el director era Eliso Nali y como había una sóla cámara, me decía que tenía que agarrarme así porque la cámara me enfocaba. Después volvió Marta Reguera y dijo “¿qué pasa acá?”. Estuvo un par de meses y se fue.

G: Ah, volvió Marta…
O: Sí, pero la mano había cambiado. No había padres, éramos todos chicos.

G: O sea que Romualdo Quiroga no estaba…
O: No. Nosotros estábamos contentos que volvíamos a la tele, y en un momento estábamos estudiando, teníamos como tres libretos adelantados. Yo me “pongo de novio”, bueno ésa era otra, “ponerse de novio”, “noviazgo”… Uno se podía poner de novio pero con alguien que estaba allí, del grupo, pero no, inventaron un almacén. Voy a comprar y me gusta la que atiende el almacén. Pero eso ya parecía más de adultos, no de chicos como veníamos haciendo. Entonces voy a “comprar queso”, y la otra me dice “¿qué queso querés?” (hace la gesticulación)

M: ¿Qué actriz era?
O: No me acuerdo el nombre, tengo una foto pero no me acuerdo el nombre. Y me dice “bueno, tenés queso de acá, tenés éste, ¿querés probar un poquito?” (hace el tono de burla) y yo decía “siii, cómo no” (risas). Y nace como un romance.

M: No me acuerdo de eso…
O: Mejor, ¡ fue horrible!. ¡Que nadie llegue a conseguir eso!. Y apareció un hermano, que dijo: “¿qué pasa?”. Yo dije: “nada, me estaba atendiendo”. “Ah, porque los veía cerquita”, dijo él. Entonces, armaron la historia. Luego el hermano, que era re cuida, se juntó con una patota para pegarme. Fue la primera vez que hicimos exteriores, fue en una plaza cerca de Canal 9, por Dorrego. Yo llevaba una camisa blanca. Bueno, me dicen que va a haber una pelea, me pidieron que pareciera real, yo pregunté “¿me van a fajar en serio?”. “Uh, va a haber chocolate”, me decían. “Chocolate” significa cuando hay sangre. Entonces vengo caminando, se me vienen los tres al humo y yo jamás le había pegado una piña a nadie. Bueno, me tiran al piso, hay un primer plano con mi cara y el flaco que me va a pegar con un tronco. Y termina ahí con Jacinta en el plano diciendo: “¿qué habrá pasado con Palmiro?. ¿Estará vivo?” (hace la imitación)
Y de pronto me dicen “va a volver Romualdo Quiroga”. Claro, era mi “viejo” y alguien me tenía que cuidar, por eso tenía que aparecer de nuevo.


  Imágenes de la revista "Tv guía" del ciclo "Séptimo Grado",  realizado en 1984

G: Lo tuvieron que convocar…
O: Claro. Nosotros, cuando terminamos el programa, continuamos haciendo teatro, íbamos por los barrios, pero antes de terminar “Séptimo Grado…” ya estábamos haciendo teatro, entonces la gente no entendía cómo habían pegado un troncazo en la cara y en el teatro me veían bien y me preguntaban: “Palmiro, ¿cómo estás?” y nosotros respondíamos que eso era algo “del otro programa” (risas). Bueno, yo estaba contento que volvía Romualdo Quiroga, tenía los tres libretos estudiados y me paró Alberto Marchi, que era un productor, me dijo que vaya a maquillaje, y que los libretos habían sido cambiados por cuatro hojas. Tres libretos enteros habían cambiado por cuatro hojas. Le pregunté qué pasó y me dijo que el ciclo se levantaba. Entonces no hizo falta que volviera Romualdo Quiroga. El programa había terminado un viernes con mi cara golpeada y volvió un lunes, estando sentado en mi casa con Anselmi y con una curita nada más. Ya había pasado tiempo desde la paliza, así que me quedé sin novia y sin viejo (risas).
G: ¿Y por qué terminó?
O: En ese momento Jacinta estaba con cara de culo, Efraín también, y nosotros íbamos a preguntarle a Jacinta. Nadie me lo supo explicar. Con el tiempo me enteré lo que pasó. Cristina se peleó con Romay porque en el patio estaban muchos chicos, algunos hablaban y otros no. Entre los que no hablaban había entrado uno de los hijos de Romay. El chico había entrado al vestuario, se puso camisita, corbata y fue al patio. No sé cómo se enteró Cristina y se enojó porque el chico se había puesto solo y lo hizo sacar. Ahí vino el problema y se levantó el ciclo. No me acuerdo del final, habrá sido muy malo para que no me acuerde.

G: Recuerdo que ustedes se despiden llorando y vos le decís que la van a visitar y ella te contesta que al principio sí, pero que luego cada uno irá por su lado.
O: No me acordaba. Sí del primero, ése me acuerdo patente, porque era la presentación…. Estaba la voz del locutor que decía “y ahora vamos a conocer al alumno Palmiro Cavallasca” y aparecía Romualdo Quiroga en el taller, yo me olvidaba la letra y él me decía “vos tenés que hacer de burro, mancharte con grasa cuando venís al taller”. Me decía “no te pongás a llorar porque te voy a dar una que te va a hervir la cabeza de verdad” (risas). Era duro Romualdo pero aprendí. Me hacía reír mucho.

M: ¿Y te quedó merchandising?
O: ¡Ah, qué palabra jodida la tuya!. En ésa época no se decía así (risas). Creo que había pero trucho, no tanto legal. Lo que sí estaba era el álbum de figuritas y los discos. Sacamos dos, uno marrón con la cara de Cristina y otro donde estamos en una pileta. Yo no quería saber nada con la pileta, tenía complejo de gordo (risas).

G: ¿Lo de la pileta adónde lo hicieron?
O: En Parque Norte.

G: Creí que era un anticipo de alguna versión veraniega como se había hecho en el ciclo anterior…
O: No, lo que pasa es que coincidió la presentación del disco cuando fuimos a hacer la temporada en Mar del Plata.

G: ¿Asistía a las grabaciones Don Abel Santa Cruz?
O: La obra de teatro la había escrito él y fue los dos primeros días. En la televisión, fue dos días. La idea era de él pero lo escribía otro.

G: Claro, la historia es real.
O: Sí, eso decía.

G: Está editado en un libro llamado “Cuentos de Jacinta Pichimauida”, y relata las aventuras de sus compañeros en torno de Jacinta que fue real.
O: Sabía lo de la radio, y cuando estuvo en la revista Patoruzú.

G: Con el correr de los años da la sensación que muchos de ustedes (no es tu caso) le escapan a los reportajes y se dice que la actitud de Lucía Puenzo influyó en ello al publicar el libro de “La Maldición de Jacinta Pichimauida” en donde utilizó notas realizadas a ustedes.
O: No, la molestia vino por eso, porque ella dijo “que nos había entrevistado” y no nos hizo ninguna nota, no habló con nadie. Ella se metió en una editorial y empezó a utilizar recortes. Una vez salió en Clarín diciendo que se basó en hechos reales y conmigo no había hablado nunca. Pasó un tiempo y me dijeron que en el libro se hablaba de mí, diciendo que yo era remisero… después confundió a Graciela Cimer con la Etelvina nuestra, Laura Tuny. Cimer fue la Etelvina del ciclo anterior y ella daba a entender que había actuado con nosotros. Luego habla de la muerte de Cristina, la muerte de Martín, que era un compañerito nuestro y murió en un accidente automovilístico. Ella confirma que Cirilo y Siracusa fueron a robar… Ahí aparecí de nuevo en la tele, cuando fue lo de Cirilo y Siracusa.

M: ¿Ah si?
O: En ésa época yo vivía en el kiosco y no quería salir cuando vi los móviles de Crónica y de otros canales. Pero uno entró y me enganchó. Fui a lo de Mauro Viale, que ya me conocía de la otra época y Mauro, conmigo, diez puntos. Fue muy respetuoso y me dijo las preguntas que me iba a hacer y que no iba a sacar nada de contexto. Cuando sale Cirilo nos avisaron a Efraín y a mí para “recibirlo”.

G: Ahora está libre ¿verdad?
O: Sí, pero no lo ví más. Lo fui a buscar pero desapareció. Cuando vino el corte le dije “negro vení acá. Contame la verdad yo no voy a decir nada. Él estaba muy perseguido creyó que la cámara lo seguía. Le pregunté por qué se comió tres meses si no había hecho nada. Entonces Cirilo me dijo “¡qué buena pregunta, hacémela!”. Cuando volvimos del corte, le pregunté y me dijo “ah, no te lo puedo contestar”. Hasta ahí yo ponía las manos en el fuego por el negro pero después me empecé a correr. Luego la llamé a la mamá, se había mudado. No supe nada más, antes el hermano lo defendía a muerte y después no lo defendió más.

M: ¿Volviste a ver a los chicos?
O: No…tenía los celulares de algunos… al último que vi fue a Cirilo en el caso que te contaba, a Fernando (Florentín) que se casó con Bibi (Andrea Rodríguez). A Graciela Clusó la vi en un reportaje y ella decía que “era actriz”. A Etelvina cada vez que la veía le preguntaba cuándo sacaba el disco porque nos encontrábamos con varios una vez por año, siempre había al menos un reportaje por año y le preguntábamos y nos c… de risa.

M: ¿Era similar al personaje de Etelvina o nada que ver?
O: No, nada que ver. Era diez puntos. Lo que pasó es que el trato que teníamos todos en el programa se desfiguró cuando tuvieron diez o quince años más. La esperanza que tengo es si la veo a Gloria Carrá, podremos estar abrazados un año y medio. Vos ves los recuerdos y las cosas que te escribían, por ejemplo “te quiero sos mi mejor amigo, te recontra quiero y te quiero y te quiero”. Con Gloria había otra cosa, ¡no amor eh!, sino amistad. Hacíamos trabajitos con ella fuera del programa, por ejemplo una propaganda para Billiken, la madre de ella tenía experiencia y ayudaba.

M: Y la publicidad aquella en la que empezabas las clases con tu hijo…
O: Yo estaba manejando un remise, cuando me llamaron de una productora y me dijeron: “nos gustaría que hicieras una publicidad”. Ya me la veía venir, les dije: “a ver, sorprendeme, tengo que hacer de… “. “Cavallasca” dijo ella. Pero ya habían pasado 17 años, y la verdad, no me calienta hacer de Cavallasca hasta que me muera. Es más, estaría bueno que nosotros hiciéramos de padres de nuestros hijos en la escuela, eso estaría bueno. Bueno, entonces la productora me dijo: “Esto transcurre en un Supermercado, que sería Norte/Tía, y comprando una línea de equis productos, esos productos tienen premio como ser mochilas, bicicletas, útiles, guardapolvos, etc. La idea es que entres vos, serías Cavallasca e irías de la mano de un nene que es supuestamente tu hijo”. Y ahí me iba gustando más, me iba contando y se me caían las lágrimas

M: Que lindo momento…
O: Entonces, me dijo: “Dada la posibilidad que los premios están buenos, a vos te pica el bichito y querés terminar el colegio”. Me senté entre varios pibes, la maestra pasaba lista y de pronto dijo “Palmiro Cavallasca”. Y yo con mi voz digo: “Presente señorita”. Tenía pelo largo y chiva y me hicieron afeitar. Después me llevaron a una peluquería. Me hicieron un buen arreglo. Y aparecí mostrando los premios, cuando el locutor decía que se podían ganar una bicicleta, aparezco encima de la bicicleta y el efecto con el humito como que la había reventado (risas). Después decían que podían ganar una computadora, y estaba mi hijo tocando el Mouse y yo aparezco con una ratonera y la pongo en el Mouse. Entonces después acariciaba la cabeza de mi hijo y remataba diciendo “por eso papá y mamá me decían que terminara el colegio”. Era simpático el aviso, porque yo lo acompañaba hasta la puerta a mi hijo y me imaginaba que estaba dentro del aula… Gracias a ese aviso estuve en varios programas haciendo el “chivo”.

G: ¿Por qué no estuviste más en la tele?
O: Me lo explicaron cuando buscaba representante. Me dijeron que yo había sido Cavallasca, que fue un éxito y que debía ir a Suar o a Tinelli, que en ese momento estaban convocando figuras de antes. El problema es que fui a Ideas del Sur, todo muy lindo, pero en la recepción estaba una piba de veinte años. Yo, con cuarenta. Andá a explicarle a una de veinte quién sos… Y esa cosa de andar explicándole no me iba, lo hice. E insistiendo, lograba llegar pero me trataban como un actor que buscaba trabajo y yo quería hablar con alguien de más arriba, que me conociera. Yo no quería un rol protagónico pero sí la posibilidad de hacer un personaje. Me llamaron a los pocos días y me dieron un bolo para Son Amores. En principio le iban a dar tres bocadillos a uno y tres a mi y decidieron darme los seis bolos a mí, se ahorraban un actor. Hasta ese momento los que estaban ahí no me conocían. Entró Miguel Angel Rodríguez, y en la escena yo tenía que separarlo de Mario Pasik, porque se estaban peleando. Para mí era todo nuevo, el micro ése que le llaman motorman, los exteriores. Antes nosotros grabábamos 12 horas al día en cambio ahora grabás tu parte y te vas. Grabamos la escena y Miguel Angel la para. Dice: “acá todo muy lindo, nosotros tenemos cuarenta y pico de ráting, tenemos los galancitos, somos famosos, (me agarra) pero éste que está acá, ¿saben quién es éste?. Este muchacho es más famoso que todos ustedes. ¡Es Palmiro Cavallasca, señores!. Todos aplaudieron. Ahí me empezó a picar el bichito. Lo hicimos, y en la escena le digo a él, “Todo bien señor Sánchez, pero mi hermana es fanática suya, ¿me daría un autógrafo para ella?”. Y él, fuera de libreto, me dice: “está bien te lo doy si vos me das el tuyo, porque mi hermana es fanática de Palmiro Cavallasca”.

G: ¿Había problemas en mencionar tu apellido en el aviso de Norte?
O: En ese momento la productora tuvo que pedir permiso porque los derechos los tiene la gente a la que la viuda de Santa Cruz les vendió los derechos. Al final les pagaron diez mil dólares sólo para poder decir “Palmiro Cavallasca”. A mí me dieron cinco mil. Después me encontré con el padre del que había hecho de mi hijo y me dice “a mi pibe le pagaron cinco mil dólares?. No sabés la vena que tenía…

G: También estuviste en “El Profesor Punk”
O: Sí, con Jorge Porcel. En la película, él grababa la misma escena varias veces pero con chistes diferentes y luego elegían uno. Cuando grabé con Miguel Angel Rodríguez también se hizo eso.

G: Y hace poquito en Todos contra Juan…
O: Sí, se emitió en dos capítulos mi participación. Allí hacía de Omar, no de Cavallasca. Si ahora me llamarían de algún lugar, iría. Ni siquiera preguntaría cuánto me pagan…
Luego nos mostró el álbum de fotos y recuerdos de Señorita Maestra. Varias junto a Cristina Lemercier, Cirilo y Meche. Nos muestra una ilustración que le hicieron.
M: ¿Sos conciente todo lo que tu personaje generó en la gente?
G: ¿Eras el más destacado, no?. Junto con Cirilo, claro.
O: Y, yo no lo voy a decir mejor decilo vos… (en eso entra un cliente). A ver señor:¿quién era más importante? ¿Cirilo o Cavallasca?
Cliente: ¡Cavallasca!

Y entre las risas finales, se nos pasó una tarde a puro mate y con un corazón que nos “hirvía” de emoción y nostalgia…
Gus
(Feliz año a todos, en http://elayervuelveami.blogspot.com/ la primera parte de esta nota)


23/12/10

LAS APARIENCIAS ENGAÑAN


En los años «90 hizo furor la televisión por cable. Si bien ya existía en la década ochentosa, en la posterior se hizo más popular. No había mucho para elegir, pero uno hacía zapping fascinado con los sesenta y pico de canales, y siempre caía en Space o HBO Olé si quería ver una peli o en el querido Cablín para reírnos como niños que no queríamos dejar de ser.
Pero había lugar también para el romance en la tele. Y si a esto se lo combinaba con algo de suspenso, mucho mejor. Si bien hubo series que han tenido estos condimentos, pocas veces se ha visto una relación romántica tan fuerte y decisiva como fue la de La Bella y la Bestia.


La presentación de una serie que mereció un éxito mayor.

Si bien muchos conocen la historia a través de la película de Walt Disney, la serie realmente tenía mucha altura. Se realizó en 1987 pero recién a mediados de los '90 pudimos verla.


Catherine Chandler (Linda Hamilton) es una abogada muy inteligente y eficaz de Nueva York, que un día es atacada por una pandilla que la abandona muy malherida y golpeada. Allí entra en acción Vincent (Ron Perlman), para salvarla y llevarla a su casa.
Ahora bien, hasta aquí no debería llamarle la atención a nadie esta escena, pero hay dos detalles que muestran que Vincent no es una persona común y corriente, pues físicamente posee malformaciones en su cuerpo, teniendo su rostro rasgos marcados de león. El otro detalle es que "su hogar" se encuentra en una ciudad suberránea oculta a los ojos de todos los habitantes de Nueva York, y el camino para llegar a ella son unos inmensos y largos túneles.
Catherine, al ser salvada, cobra más fuerzas para luchar contra el crimen organizado de la ciudad, con lo cual la serie tiene una mezcla de romance con algo de acción. En tanto, a raíz de ese primer encuentro, el amor surge entre Catherine y Vincent, de una modo muy puro, y ambos comienzan a tener un vínculo telepático que le permite a uno saber lo que le pasa al otro y viceversa, más allá del colgante de cuarzo que él le regala a ella o la Rosa de Marfil que de algún modo también los une.

Banda de sonido de la serie con Vincent en la portada (gentileza http://labellaylabestia.webs.com/)

Los capítulos se desenvuelven con la trama del episodio, que comprende la historia que debe resolver Catherine, en donde por lo general cuando corre peligro llega Vincent a salvarla, y la relación romántica - física - platónica y real a la vez, que envuelve a los dos protagonistas.
Hay una gran simbología que encierra La Bella y La Bestia, y podemos (gracias a http://perso.gratisweb.com/soniacorral/BB/) enumerarla aquí:

El Mundo de Arriba: Representa el conciente y la mente despierta
El Mundo de Abajo: Representa lo contrario, el subconsciente, el mundo de los sueños, los instintos.
Laberintos: Los caminos para llegar al subconsciente
Padre: Representa al ser superior, al conocimiento y la sabiduría.
El colgante de cuarzo: Representa a la adivinación, a la intuición y a todos los poderes misteriosos del ser humano, que nos permiten conocer hechos, eventos y verdades como si pudiéramos ver a través del tiempo, del espacio y de las cosas. El cuarzo simboliza el espíritu puro y claro.

Es decir, la serie va más allá de los propios personajes, es un ejemplo metafórico permanente de conductas humanas que nacen de la unión de lo sentimental con lo racional.
Lamentablemente, luego de dos temporadas, por problemas personales Linda Hamilton debió abandonar el ciclo, con lo cual, toda la subtrama metafórica y profunda, se cayó a pedazos en la tercera temporada.
En esta ocasión, el argumento gira en torno a saber quién mató a Catherine Chandler. Vincent esta vez no llegó a tiempo, ella yace muerta en sus brazos y él la lleva, mirándola azorado, a la cama de su departamento para depositarla allí.
A través de esta muerte, se revelan algunos personajes, por ejemplo el fiscal de Distrito para el cual Catherine llegó a trabajar, resulta ser un elemento clave para su muerte. Se contrata a Diana, (Jo Anderson), una investigadora especial que llega a conectarse con Vincent, conocer su hogar a travéss de los túneles y lograr encontrar al fin al asesino de Catherine, que no resulta ser otro que Gabriel, (Stephen Mc Hattie), hermanastro de Vincent. Pero la serie pierde por completo su encanto ya que la ausencia de la protagonista corre a contramano de las temporadas anteriores.

Una perlita: Ron Perlman en pleno maquilaje (gentileza: http://labellaylabestia.webs.com/)

Lamentablemente, no hubo demasiadas reposiciones de La Bella y La Bestia, pero debemos decir que a nivel mundial ha sido convertida en una serie de culto. En las imágenes de todos los espectadores quedarán aquellos encuentros entre Catherine y Vincent en los túneles, aquellas noches de sueños y de realidades y sobre todo, una frase con la que se cerraba la presentación:
"Aunque no podamos estar juntos... nunca estaremos separados"
Los dejo con este video muy especial que resume gran parte de la relación entre Vincent y Catherine.




Gus


Publi Retro: Revista Anteojito en Revista Tv Guía (1985)

28/11/10

EL BATI - PROGRAMA


Un fin de semana de borrachera no necesariamente puede derivar en algo lamentable. Sino, que lo digan William Dozier y Lorenzo Semple Jr., guionistas del piloto de Batman realizado en 1965. Es que en ese estado de ebriedad ambos pergeñaron el guión de algo que había sido pedido por los directivos de la cadena ABC, como de corte policial de tono serio.
La idea surgió cuando Douglas Cramer, ejecutivo de dicha cadena, visitó el Club Playboy de Chicago, en donde se proyectaban sólo para divertimento los seriales de Batman realizados en los años cuarenta. Fue a partir de allí que se puso en contacto con Dozier, quien era el titular de Greenway Productions y además, amante de los comics (según dicen, le daba vergüenza que esto último se supiera).
Y tras ese fin de semana "etílico" se guionó el piloto y comenzaron a buscar a los protagonistas. Adam West fue el elegido y Lyle Waggoner (quien sería conocido por encarnar a Steve Trevor en The Wonder Woman) había llegado por detrás, para reemplazar a West si algo sucedía.

Adam West y Burt Ward, pilares de Batman y Robin (foto de la web)

Adam venía de participar en varios "spaghetti westers" y no estaba muy convencido de este proyecto. Dozier lo había visto en un comercial de Nestlé haciendo de Capitán Quick, una especia de parodia de James Bond. Lo que convenció a West fue el tono humorístico irreverente del guión.
Si bien hallar al actor que interpretaría a Robin fue más difícil, el elegido fue Burton Gervis, quien se cambiaría el nombre para ser Burt Ward.
Quien esto escribe, ama a Batman. El estilo de súperheroe difiere notablemente con el de Superman. Tal vez Batman y El Hombre Araña han sido héroes en todo el sentido de la palabra, venciendo situaciones traumáticas y saliendo adelante, pese a los intentos norteamericanos de querer ubicar a Superman como "el héroe de todos los tiempos". En fin, son opiniones. Recuerdo algunos veranos en la vieja tele blanco y negro de mi tía abuela, observando los capítulos de Batman, y siempre me llega a la memoria uno en donde se juntan todos los archirrivales del Dúo Dinámico para acabar de una vez por todas con ellos. Era una serie muy atrapante.
Continuemos con el elenco. Alan Napier fue Alfred, el mayordomo; Neil Hamilton el comisionado Gordon y Madge Blake como la tía Harriet. Según se cuenta, se incorporó a Harriet para ahuyentar a los malpensados que hacían raras conjeturas sobre el hecho de que dos hombres vivan en una mansión solos.
A diferencia del comic, hubo un personaje inventado sólo para la serie, el jefe de Policía O' Hara, interpretado por Stafford Repp.



La intro célebre de Batman... me mata


La ABC aún seguía en la duda sobre el éxito de este proyecto, pero había mucho dinero invertido (la Baticueva costó 800.000 dólares) y había que jugarse a todo o nada, ya que en las mediciones de audiencia las cosas no estaban marchando bien.
El primer capítulo se estrenó el 12 de enero de 1966, se llamó "Hi Diddle Riddle" y contó con la participación de Frank Gorshin en el rol de El Acertijo. Este capítulo fue tomado de un episodio del número 71 de la revista del héroe de Ciudad Gótica.
El programa fue un exitazo y estalló la Batimanía. El Batman de aquellos seriales de hacía más de veinte años era oscuro y obedecía a una lógica del cómic. Pero éste de la década del '60 además de contar con humor, tenías rasgos absolutamente psicodélicos tanto en los colores como en los estilos.
Una característica de la serie es la voz en off del propio Dozier (en la primera temporada) diciendo, al finalizar el capítulo: "Mañana, por la misma Bati-Hora y por el mismo Bati-Canal". Y lo que muchos recordamos de nuestra niñez, son las onomatopeyas de la serie: "Paf", "Kaboom", "Boof" y varias más, que salían con las estrellas típicas de historieta remarcándolas.

Las onomatopeyas clásicas, ahora en la tele. Gentileza : www.ozoux.com/

En la Baticueva, Batman y Robin salían por unos tubos que los conducían al Batimóvil. Bruno Díaz movía un dispositivo que estaba oculto en un busto de Shakespeare y detrás de la biblioteca ellos podían acceder. El truco para no encimarse era el siguiente: Adam West tomaba el Batitubo un rato antes y cuando Burt Ward lo hacía, West ya había dado el primer giro.
La base para el Batimóvil fue el Ford Lincoln Futura F4, que había sido utilizado por Glenn Ford en la película "It Started with a kiss" y fue reacondicionado por George Barris, quien había sido responsable de los coches de Los Beverly Ricos. El Avispón Verde y nada menos que de El Auto Fantástico. Barris retuvo los derechos de su creación y se lo alquilaba a la productora por semana. Nada tonto el muchacho.
Imposible no recordar la Batilancha, el Baticóptero y la Batimoto, entre otros.
Los villanos estaban compuestos realmente para el aplauso. Así desfiló, como dijimos, Frank Gorshin como El Acertijo, y este papel lo realizó en una ocasión, reemplazando a Frank, John Astin, quien encarnara a Homero en Los Locos Adams. Debo decir que El Acertijo era uno de mis villanos favoritos junto con El Pingüino.
Y hablando de éste último imposible olvidar a Burgess Meredith, quien le dio un toque fuera de guión al personaje. Meredith no soportaba el cigarrillo y para disimular su tos se le ocurrió hacer el "cuac cuac" característico que le conocimos a El Pingüino.

El Pingüino, el Guasón, El Acertijo y la segunda Gatúbela, interpretada por Lee Meriwether, quien sustituía a Julie Newmar. Lee también ha sido la Doctora Ann Mc Gregor de El Túnel del Tiempo. Imágenes de la web.

También podemos recordar a El Guasón, encarnado por César Romero. Este fue uno de los villanos que no faltó en ninguna de las tres temporadas de la serie y uno de los favoritos de la gente. Completan la galería de "malvados": El Capitán Frío (George Sanders, luego Otto Preminger y más tarde Eri Wallach; Zelda la Grande (Anne Baxter); El Sombrerero Loco (David Wayne); Falsafaz (Malachi Throne, aunque al principio ubicaban un signo de interrogación en donde iría el del actor para reforzar al personaje); Julie Newmar (Gatúbela) y Víctor Buono como El Rey Tut. Una pena que en la serie no apareciera El Espantapájaros o Dos Caras, personajes brillantes del comic.
Hubo más actores, más personajes malvados y también de los nobles, como fue el caso de Batichica, interpretada por Yvonne Craig, e incorporada en la tercera temporada.
La serie fue un boom en cuanto a merchandising y el ráting explotaba. El capítulo iba los miércoles, duraba media hora y sobre el final el Dúo Dinámico caía en una trampa de la cual debía salir pero siempre en el "próximo episodio".

Batman en pleno éxito. Aquí en la tapa de "Tv Guide" (gentileza "Cuando era Chamo")

La alteración de los nombres para el doblaje se debe a que se tomaron los publicados en las revistas de la Editorial Mexicana Novaro (por ejemplo, Comisionado Gordon / Comisionado Fierro; Bruce Wayne / Bruno Díaz).
En la segunda temporada las rutinas se hicieron previsibles, pero la caída se evitó con la incursión de varias figuras invitadas que "asomaban la cabeza por la ventana" mientras Batman y Robin ascendían un muro a través de la Batisoga. Así desfilaron: Bruce Lee, Joe Besser (uno de los últimos Tres Chiflados), y Jerry Lewis entre otros.

Adam West y Burt Ward junto a Ivonne Craig en el rol de Batichica (gentileza Libro de Oro de la televisión Argentina, material propio)

Luego hubo dos episodios semanales y en la última temporada, sólo uno que no dejaba espacio para el "continuará" porque se resolvía la trama dentro de esos instantes de emisión.
En la última temporada el ráting cayó y fue levantada. Se hicieron programas especiales, una película y mucho de lo que pasó después es historia conocida.
El detalle fuerte es que tanto Adam West como Burt Ward quedaron "prisioneros" de sus personajes y les costó mucho salir del encasillamiento.
En 1989, aprovechando el éxito de la película de Tim Burton, Canal 13 lanza al aire "El Club de Batman" conducido por Guillermo Mazzuca, en donde se emitía la vieja y querida serie. A la fecha de cierre de este post, la serie se está emitiendo por el canal de cable TCM los domingos a las 10 de la mañana en Argentina.



Batman reflejado en mis muñequitos Jack y un Robin sin capa, vaya a saber de qué colección sería (material propio)

Las películas posteriores, los cambios en los perfiles del personaje, son harina de otro costal. La intención de este post es recordar esa serie tan magnífica, tan brillantemente concebida desde el humor y la sátira, y esos tiempos en donde si nos sentíamos angustiados por algo, sabíamos que a determinada hora, en la tele blanco y negro, nos "salvarían" del aburrimiento nuestros queridos héroes, esa dupla conocida como el "Dúo Dinámico".
¡Kabloom!. ¡Santos recuerdos, Batman!

Gus
Datos: Under Cover - Rafael Daloi

Publi Retro: Premio a Petete en Revista Labores (1974) Gentileza: Ay Constanza!

9/11/10

¡CHANFLE!


Por lo general, en Tele Retro comenzamos los posts anunciando el año y el canal del programa en cuestión. Pero sería injusto reducir a Chespirito a un sólo año. Es que la obra de Roberto Gómez Bolaños ha sido de una envergadura tan grande, que trasciende los tiempos.
Ya hemos realizado un post sobre El Chavo, tal vez el personaje más importante de su autoría.
Pero en este caso, recordaremos a Bolaños sin el gorro de El Chavo, en la piel de varios personajes más que nos han hecho reír, llorar y hasta aprender buenas costumbres con mensajes claros y sencillos.

Florinda Meza, Bolaños, María Antonieta de las Nieves y Edgar Vivar. Lo que es lo mismo a decir, La Popis, El Chavo, La Chilindrina y Ñoño (imagen blog La Chicharra)

No marcaremos datos biográficos, porque para ello está la gente de Wikipedia y cientos de sitios en la web que darán referencias certeras. Apenas mencionaremos, al pasar, que el apodo "Chespirito" se lo puso el director cinematográfico Agustín Delgado, en referencia al talento que tenía Roberto para escribir historias similares a la de Shakespeare, así como también a su baja estatura. En este post nos limitaremos a recordar. Y recordando, esos límites trascenderán nuestro presente y sin dudas, nos harán retornar por un instante a nuestra infancia.

Chespirito en el rol de "Romeo". Los cuentos que narraba El Chapulín, con una biblioteca de fondo eran realmente atrapantes. Uno de mis favoritos era "El Sastrecillo Valiente". (foto: blog La chicharra)

Comencé a ver El Chapulín Colorado allá por 1978, en mi vieja casa natal de la calle San Blas. Si bien me enganchaba más con El Chavo, recordemos que primero se hizo conocido El Chapulín, al igual que en México. Y el hecho de ver en la televisión un héroe tan extraño, tan falible, era algo realmente sorprendente. Y a través de la historieta continuó ese idilio, ya que existía una revista muy querida por mí, llamada Mundo Infantil. En la misma, se brindaba un popurrí de historietas de los personajes más populares del momento. Y El Chapulín, junto con El Chavo, era un imán impresionante para "tenerlos en papel".

Una revista increíblemente buena (foto de la web)

Pero no había que parecerse al Chapulín, ¡había que serlo!. Las caretas no escapaban a ello. Hace poquito conseguí las caretas con las que jugaba en mi infancia:

Si Bolaños hubiera arrancado en la década del '90, sin dudas hubiera triplicado sus ingresos en materia de lo que en estos tiempos se conoce como "merchandising". Esto es una sólo una muestra de algunas revistas que tuvieron en tapa a Chespirito:

Bolaños para todos los gustos. En la piel de sus personajes o en los momentos de su vida privada (imagen blog La Chicharra)

En una de sus tantas visitas a Argentina, recuerdo un diálogo entre Bolaños y Mario Mactas, en donde el periodista le señalaba que El Chapulín no era un héroe de la talla que podía tener Superman. Bolaños, con esa serenidad que lo caracteriza, le indicó que el gran valor que tenía El Chapulín consistía en tener miedo y pese a eso, arriesgarse a enfrentar el riesgo. Superman podía ser valiente por naturaleza pero El Chapulín temblaba de temor, y pese a eso sacaba fuerzas para vencer. Esta anécdota me pegó muy fuerte e indudablemente me marcó en lo que a verdaderos conceptos de valentía se refiere.

Hermosa foto en blanco y negro del Chapulin con Florinda Meza (imagen blog La Chicharra)

El disco de El Chapulín Colorado ha sido uno de los primeros que tuve en mi vida. Me gustaba mucho la tapa, y el contenido era tan bueno que mi Winco no dejaba de emitir esas canciones inolvidables, y este Long Play tenía una particularidad: la mayoría de las canciones estaban interpretadas por El Chavo, era una gran apertura y una invitación a comprar el LP del querido personaje de la Vecindad.

El disco que aún conservo. Por demás querible (imagen propia)

Es que Chespirito siempre ha tenido el propósito de dejar un mensaje en todas sus obras. La preocupación por la pobreza en el caso de El Chavo, la situación de miseria de los malandras, como se da en El Chómpiras y Peterete (luego El Botija), la caracterización de los ancianos ("¿insinúa que soy viejo?", preguntaba el Doctor Chapatín) y hasta la ironía de Los Chifladitos (uno de mis sketchs favoritos), que dentro de un contexto de locura, podían resolver situaciones que más de un cuerdo no lo lograría. El siguiente es un sketch típico del cine mudo humorístico, en este caso hablado y muy bien desarrollado por Chaparrón Bonaparte y Lucas:



Un dato no menor es que Chespirito estaba muy bien rodeado. Actores de la talla de Ramón Valdez, Carlos Villagrán, Angelinez Fernández, Edgar Vivar, María Antonieta de las Nieves, Rubén Aguirre y Raúl "Chato" Padilla han engalanado históricas jornadas de trabajo. El rol de Florinda Meza como actriz puede ser discutible, más allá de su recordada Doña Florinda o La Chimoltrufia de Los Caquitos.
La película El Chanfle, estrenada en 1979, probablemente haya sido la primera que he visto en cine. Hace poquito tiempo me la han podido conseguir y quería compartir con ustedes un fragmento de la misma. En esta película, se reúne el elenco más completo que haya participado en el ciclo de Chespirito, ya que en el mismo, nunca habían actuado juntos Carlos Villagrán y Ramón Valdez junto a "Chato" Padilla. Si bien no comparten escenas en el film junto a quien personificara a Jaimito el Cartero, integran con él por primera vez un reparto (el único acercamiento es cuando Padilla "salta" por encima de Villagrán en el vídeo que veremos a continuación):



Y una perlita es esta imagen, obtenida del blog "La Chicharra", de la tapa del disco de Florinda Meza interpretando una de las canciones de El Chanfle.


Volviendo a ver la peli de grande, reconozco que está bien hecha, interpretada al más puro estilo Bolaños, con gags efectivos y buenas actuaciones.
Quedarán muchos personajes por mencionar y muchas frases. Pero tenemos la suerte de estar hablando de un personaje que se ganó la vigencia permanente, ya que sus creaciones han marcado la huella imborrable de los grandes. Alguna vez dijimos que Alberto Olmedo era el artista más trascendente de Tele Retro. Ahora redoblamos la apuesta y sumamos a Don Roberto Gómez Bolaños a ese nivel de grandeza.
Dejamos para el final la última perlita de este post, una foto increíblemente rara y para el aplauso:

Un "Chavo Colorado" o un "Chapulín con gorra" (imagen del blog La Chicharra)

Mucho se ha hablado detrás de cámara de las relaciones de Roberto Gómez Bolaños con el resto del elenco. No es un tema que sea de interés tratar en este post. Algo similar sucede con Martín Karadagián. Lo insoslayable e irrefutable es que ambos han creado universos en donde muchos encontramos un mundo en donde "sospechábamos desde un principio", que podríamos entrar y salir de él cuando quisiéramos.
No hay de qué... sonomás de papa...

Gus
Imagenes propias, de la web
y de http://lachicharra-brasil.blogspot.com/



Publi Retro: Volkswagen 1975, en Revista La pequeña Lulú, Editorial Novaro, 1975

6/10/10

EL "PELITO" MÁS CHICO

1982. Canal 13. Por lo general, en Tele Retro solemos presentar informes de los programas o artistas televisivos de los años '80 o '90. Pero en esta ocasión tendremos a uno de los protagonistas "dentro" del propio post. Nos referimos a Leandro Martínez, una de las figuras de Pelito, el ciclo pionero en materia de programas infanto-juveniles. Esta es una entrevista que realizamos junto a Marisa Catania al querido y recordado "Leandrito". Matizaremos la misma con algunas perlitas fotográficas de consideración.

Leandrito trabaja junto a su familia en el Restaurante "Volver a empezar", una continuación de la fábrica de pastas que lo vio crecer, de nombre "Irupé". No fue compañero mío de la escuela aunque compartió un breve lapso en la misma pero en otro grado. Se extraña la tele de antes y creo que se extraña a la gente que "hacía" la tele de antes.

G: Así como se le pregunta al futbolista que hace un gol por primera vez qué es lo que sintió, ¿qué sentiste vos cuando se prendió por primera vez una cámara?

La primera vez que estuve frente a una cámara es como que no entendía bien quién me hablaba, de dónde me hablaba, fue para una prueba que hicimos para Pelito que fue Crecer con papá, con Lorena Paola. Y después empezamos con Pelito y fue como un juego y una cosa que, cuando me di cuenta, “ya estaba”... Empecé a los siete años.


Perlita 1: la intro de Pelito (material propio)

M: Se podría hacer hoy un programa como Pelito?

Creo que cambió todo, la tele cambió, los chicos cambiaron… no sé si se podría hacer un programa como Pelito, si funcionaría como éxito. A Pelito lo veía una amplia franja de edades, pero la tele cambió mucho, no había cable, antes tenías dibujitos solamente a la mañana, ahora hay canales que los pasan todo el día, hoy en día sería difícil.

G: ¿Podías compatibilizar el estudio con el trabajo?

Sí, porque yo estudiaba a la mañana y Pelito lo grababa a la tarde. Igual no me gustaba mucho estudiar (risas)

M: Claro, y al principio Pelito estaba los sábados…

Sí, habrán sido 15 o 20 programas que estuvo los sábados, después empezó todos los días a la tarde hasta que terminó.

G: ¿Hacían mucho teatro?

Sí, en el Ateneo, que ahora es el ND Ateneo y después hicimos en Mar del Plata en el Regina. Era todos los días lleno, lleno…

M: ¿Hubo figuritas de Pelito?

Hubo de Clave de Sol, lo que pasa es que Pelito fue el “acomodarse”, el empezar. Los negocios comenzaron a hacerse con Clave de Sol y por ahí la plata la empezaron a ver con Montaña Rusa. Fue ese proceso, Pelito fue el primero, lo mejoraron un poquito con Clave y Montaña Rusa que fue otra cosa.

Perlita 2: El elenco en fotos. Imagen aportada a la web por Paula Dougan ("Pelusa")

G: Ustedes llenaban teatros .¿Cómo tomaban ese éxito?

Yo lo tomaba como un juego porque tenía otra edad, no la de Adrián (Suar) o la de Pepe (Monje). Adrián sabía adónde quería llegar. El se codeaba con los top del momento, por ejemplo Mayorano, él estaba rodeado con esa gente, yo tenía otra edad y esa edad no te permitía pensar en otro negocio.

G: ¿Te ves con alguien de aquel elenco?

Sí, con Damián Canavezzio, me conecto con Pollini, Claudia Flores, Paula Duggan, por ejemplo, hoy mi mamá se va al cumple de quince de la sobrina de Damián…

G: Y Damián llegó a participar de Clave de Sol…

Sí, estuvo un tiempo.

M: Y en ese “paso” él cambió, de ser el gordito simpático de Pelito…

Sí, pero ahora tiene una pinta… siempre tuvo mucha pinta (risas)

Perlita 3: parte del elenco, faltaba Paula Dougan ("Pelusa") quien se incorporaría 8 meses después de la primer salida al aire (foto aportada a la web por Jorge Pollini ("Osvaldo")

G: ¿Qué programa harías si tuvieras la chance?

Y… alguno de Pol-ka. Porque más allá del vértigo que tiene una tira diaria, está todo bien tratado… la imagen… hoy en día cambió todo porque antes veías a algún actor y por ahí te preguntabas “¿cómo puede estar?” en cambio hoy es todo mucho más parejo.

G: Después de Pelito ¿qué trabajos hiciste?

Estuve con Jorge Porcel, Thelma Biral, con Mellino. Estuve también en “Así son los míos” que fue el programa en donde empezaron Andrea Pietra, Pablo Novak… Después de Pelito el mejor recuerdo lo tengo de allí.

M: ¿Actuaste allí con Rodolfo Machado verdad?

Sí, con Rodolfo trabajé allí y en otra novela que la hice en el ’87 y recién salió en el ’90 porque iba a ir para afuera, la dió Telefé, se llamaba “Valeria”

Perlita 4: los chicos en Mar del Plata, nota de la revista "Tv Guía" aportada a la web por Paula Dougan ("Pelusa")

G: ¿Por qué te alejaste de la pantalla?

Creo que el tiempo me fue alejando… Cuando estaba en “Así son los míos” ya estaba en la secundaria y ahí se empezó a complicar porque sí o sí tenía que terminar la secundaria. Después hice algo pero ya menos… hace 13 años hice “Mi Cuñado” con Brandoni y Darín…

M: ¿Extrañás la tele?

A veces extraño, lo que pasa es que acá estoy bien, estoy cómodo, hay mucho trabajo. A veces llega un momento en que te tenés que tirar para un lado o para otro, yo me quedé acá porque estoy bien, es el barrio donde nací, viví hasta que me casé, con un intervalo en donde viví en Versailles pero yo nací aquí arriba (señalando el piso superior). Primero fue una fábrica de pastas y hace siete años pusimos el Restaurante y a partir de ahí fue trabajo, trabajo, pero… es una posibilidad utópica, que alguien te venga a buscar, pero si algo me sale, sin dudas agarro. Aunque, volviendo al jugador de fútbol que antes mencionabas, si el futbolista no entrena, no trabaja, por ahí está gordo, lento… y en la tele creo que es lo mismo, necesitás el roce…

Perlita 5: Sinopsis y promo de "Pelito" en revista Tv Guía (material propio)

G: ¿Qué te pasa cuando ves Pelito por Volver?

Me gusta mucho, se lo muestro a mi nene más grande.

M: Hay varios actores que están muy molestos porque repiten sus obras y no les pagan…

Sí, yo también estoy molesto, no me pagan nada… no sé que se puede hacer, dicen que hubo uno que compró los derechos de por vida para el Canal Volver, ahora si es verdad o no, no lo sé, pero ellos tendrían que pagar. Hubo una época en que pagaban… Pero también por ahí la imagen mía ahora no vale pero ellos con mi imagen cobran publicidad, había una época en que Pelito tenía una tanda que se te caían las lágrimas… Por ahí habría que realizar algún recurso pero tal vez no lo pasan más y bueno, es lo que hay, está ahí y lo pueden ver. Si pagan pagan y si no bueno. Yo no lo necesito pero imagínense un actor o una actriz sin trabajo, le vendría bien… Hubo una vez una movida de Echarri, hace tres o cuatro años pero no sé en qué quedó…

Monge, Emiliano, Paula, Julián, Adrián, Claudia, Analía, Lorena y Leandrito (Libro TV Manías, Hermida - Satas, material propio)

G: ¿Qué fue de los demás chicos?

Damián no se dedicó más, Emiliano Kaczka es abogado, Analía Kaczka… no sé mucho qué fue de la vida de Ana…

G: ¿Se llevaban bien ustedes? Ella era “Bichi”...

Nos peleábamos mucho (risas). Y después, Claudia Flores, siempre está buscando algo por el lado de la actuación, bueno a Pepe Monje lo vemos, a Adrián creo que le fue un poquito bien (risas), Paula Duggan está casada, Solange, me entero a veces por una chica que trabaja en el Hospital Alemán que a veces va a buscar estudios pero no sé más nada…

M: Buena actriz Solange…

Sí, buena actriz, todos en realidad eran buenos…

Solange Mathou (revista Tv Guía, junio de 1984)

G: Al convivir tantas horas en las grabaciones me imagino que se viviría un clima muy especial…

Y sí, fueron tres años… estábamos desde la una de la tarde a veces hasta las nueve de la noche… más el teatro, era un ritmo bastante vertiginoso.

G: El último capítulo habrá sido emocionante grabarlo

Sí, lloraba mucho… llorábamos mucho.

M: ¿Qué cosas buenas y no tan buenas te dejó Pelito?

El reconocimiento de la gente, hasta el día de hoy me dicen “uhh vos trabajabas en Pelito…” . Y lo malo... no, no encuentro nada malo. En la escuela había de todo, estaba el que me quería por cómo era yo y también estaba el que me quería pegar por haber sido Leandrito… había de todo…

G: ¿Cómo surgió lo de aquel casting?

Iba a estudiar teatro y me llevaban a los castings pero en Pelito sentí desde el primer momento que era mi lugar. Llegué y estaba cansado porque había una cola inmensa, entonces me senté y puse las piernas en el escritorio y el director me dijo “¿qué hacés?”. Le dije: “estoy cansado”, me miró y me dijo “listo”. Hicimos una prueba en la sala de ensayos, el bolo en “Crecer con papá” y de ahí en más, Pelito. El recuerdo más fuerte que tengo fue al final del primer capítulo. Supuestamente a mí me habían robado la tortuga y era una pelea entre dos barras contra unos chicos malos, y yo estaba que iba y que venía para Mar del Plata con mi vieja y mi viejo decía que ella estaba loca que eso no iba a salir (risas). Entonces, me trajo mi vieja para grabar y la última escena transcurría en un baldío de La Lucila. El camarógrafo trastabilla, se cae y se rompe la cámara. Quedaba por grabar la última escena, así que me tuve que ir a Mar del Plata otra vez, luego volver, mi viejo la quería matar a mi vieja… así que tuve que volver a grabar esa escena y a partir de allí, hasta el día de hoy, cuando se edita algo y se pregunta “¿desde dónde vamos?” alguien responde “desde que Leandrito perdió la tortuga” (risas).

Perlita 5: Leandrito con la tortuga de la anécdota (captura de tv)

Leandrito hoy, en la fábrica de pastas y el Restaurante Familiar.

M: ¿Pensás que a tus hijos les tira la tele?

A uno sí, pero al otro no, claramente no (risas), ¡ no le importa para nada!. Pero si quisiera trabajar en la tele, si así lo desean, los alentaría, obviamente…

Entrevista realizada junto a Marisa Catania (a quien felicito, hizo unas preguntas buenísimas), podés volver a disfrutar esta nota en http://elayervuelveami.blogspot.com/2010/10/poderozo-el-chiquitin.html


Publi Retro: Helados Frigor, año 1972 (taringa)


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